A menudo las ventanas de nuestro hogar terminan produciendo esos molestos chirridos, que todos conocemos. Además, los plásticos y gomas que las protegen suelen estropearse con el tiempo, provocando que entre el frío y el calor.
Por todo esto, queremos enseñarte en este artículo, cómo lubricar tus ventanas para por fin olvidarte de los chirridos y demás molestias. ¡Es muy sencillo! Sigue leyendo para comprobar lo fácil que es.
Primero, necesitarás WD-40® Producto Multiusos y un trapo, toalla o paño viejo o papel periódico para que la grasa no gotee en el suelo. En muchos artículos, ya te hemos explicado cómo eliminar los chirridos que hacen las puertas de casa o del coche. Pues bien, el proceso es exactamente el mismo. Deberás limpiar y lubricar las ventanas.
Los chirridos se producen porque las bisagras acumulan polvo, grasa y todo tipo de suciedad. Para eliminar esa suciedad y los chirridos, aplica WD-40® Producto Multiusos sobre las bisagras y déjalo actuar. Verás cómo, en segundos, la grasa comienza a caer y los ruidos desaparecen de forma instantánea.
Además, con esto estarás lubricando las bisagras y protegiendo la ventana contra el óxido y la corrosión.
Un problema frecuente también es el desgaste de los plásticos y gomas de nuestras ventanas, ya que paso del tiempo y las condiciones climáticas les afectan enormemente.
Para solucionarlo, podemos utilizar un lubricante específico como WD-40 Specialist® Lubricante de Silicón. Creado para alargar la vida útil de plásticos y gomas, y que soporta temperaturas de hasta -35º y +200º, por lo que es muy recomendable para lubricar ventanas.
También repele la suciedad, protege de la humedad y soporta fuertes presiones, dejando a tu ventana perfectamente protegida y lubricada. Además, puedes usarlo en puertas correderas, pestillos, carriles de puertas de garaje, y más.
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