El acero inoxidable es un acero que puede encontrarse tanto en interiores (cocina) como en exteriores (barandales). Aunque su nombre implica acero inoxidable puede mostrar algunas manchas de óxido en su superficie cuando se expone a condiciones exteriores. En este tutorial te diremos cómo eliminar el óxido del acero inoxidable.
El acero inoxidable es una aleación compuesta principalmente por acero al que se han añadido otros materiales, como el cromo, para darle resistencia a la oxidación. El acero inoxidable para interiores nunca se oxida, sólo requiere un pequeño mantenimiento para eliminar el polvo y otros rastros.
El acero para exteriores está expuesto a condiciones más duras y puede oxidarse con el tiempo. La verdad es que no es el acero el que se oxida, son las manchas de óxido que se crean como consecuencia de las partículas que se depositan en el acero inoxidable y que se oxidan. Este fenómeno se denomina oxidación superficial.
Pero, ¿cómo se elimina? Sigue leyendo para aprender paso a paso como quitar el óxido del acero inoxidable.
Para saber como quitar el oxido del acero, primero limpia la superficie del acero con un poco de agua. A continuación, limpia la superficie con un paño de microfibra.
Si los restos de óxido son superficiales, aplica WD-40® Producto Multiusos en un paño suave y frota la superficie. Si el óxido persiste, utiliza un producto especializado en el mantenimiento del acero para eliminar las manchas de óxido. Los productos a base de ácido oxálico, como la sal, serán perfectos.
Si el óxido está demasiado extendido en la superficie, tendrás que utilizar medios más rudos para eliminarlo, como una máquina de decapado y pasivación del acero inoxidable. Este proceso elimina por completo los óxidos coloreados del acero y luego forma una fina película transparente de óxido de cromo. Te aconsejamos que acudas a un profesional para este tipo de tareas de eliminación del óxido.
Para evitar tener que buscar como quitar el oxido del acero, te aconsejamos que adoptes medidas preventivas para evitar su aparición. Para el acero inoxidable interior, bastará con una limpieza regular. Para ello, será suficiente con utilizar un poco de agua con una esponja y un paño de microfibra para eliminar restos de grasa, huellas dactilares o simplemente polvo. Después, pasa el trapo de microfibra impregnado ligeramente con WD-40® Producto Multiusos, para mantenerlo libre de partículas de óxido, además evita que se le pegue la grasa y se marquen huellas dactilares.
Para el acero inoxidable de exterior, será necesario limpiarlo regularmente con agua clara y secarlo con un paño. Si es necesario, puedes utilizar un poco de agua con jabón. En entornos muy húmedos y/o marinos, la limpieza debe ser frecuente, ya que la sal y la humedad pueden acelerar el proceso de oxidación. Por último, para evitar tener que eliminar el óxido en el acero, puedes prevenir su aparición con WD-40® Producto Multiusos. Con una sola capa es suficiente para proteger cualquier metal de la oxidación.
© 2025 WD-40 Company.
Derechos reservados
Regístrate para recibir ofertas exclusivas, consejos útiles e información de la Marca WD-40.