¿Alguna vez has notado que tu motor tiene restos de grasa o suciedad? Aprender cómo lubricar un motor puede parecer una tarea complicada, pero esta guía paso a paso está aquí para ayudarte.
Con WD-40 Specialist® Espuma Desengrasante de Máquinas y Motores, no hace falta hacer un gran esfuerzo para obtener buenos resultados. ¡Sigue nuestra guía para conseguir un motor de mejor rendimiento en poco tiempo!
Lo primero y más importante, antes de empezar a lubricar tu motor, asegúrate siempre de llevar algún tipo de protección para los ojos. También comprueba haber tapado todos los componentes eléctricos con una cubierta de plástico.
A continuación, antes de poder lubricar y recuperar el motor, es importante prepararlo primero. Puedes hacerlo dándole un pre-desengrasado rápido.
En primer lugar, elimina cualquier residuo que pueda haber en el compartimento del motor. En ocasiones se nos acumulan hojas, arena, etc. Debes esforzarte por eliminar todos los restos, ya que pueden causar problemas en el motor con el tiempo. También facilitará el mantenimiento adecuado del motor una vez que se haya eliminado la suciedad.
Es más fácil eliminar la grasa del motor cuando está caliente, así que deja el motor funcionando durante unos cinco minutos más o menos para facilitar la eliminación de cualquier tipo de grasa y suciedad.
Siempre asegúrate de que tu motor se haya enfriado un poco y se encuentre a una temperatura adecuada antes de comenzar cualquier trabajo.
Una vez que tu motor esté preparado, es hora de empezar. Para hacerlo, aplica WD-40 Specialist® Espuma Desengrasante de Máquinas y Motores.
Este desengrasante puede eliminar eficazmente la grasa y la suciedad de tu motor sin dejar residuos. Este producto es a base de agua, lo que lo hace seguro para la pintura de tu automóvil. Aun así, te recomendamos aplicarlo primero en una zona pequeña y poco visible para verificar su compatibilidad.
Siempre sigue las indicaciones del fabricante antes de utilizar cualquier producto en tu motor. Sin embargo, es perfectamente seguro lubricar los componentes de metal y los bloques del motor.
Cuanto más sucio esté el motor, más tiempo necesitarás dejar actuar la fórmula de WD-40 para conseguir los mejores resultados. En la mayoría de los casos, hay que dejar que la fórmula actúe en el motor entre tres y cinco minutos.
Utiliza un limpiador de aire comprimido o una toalla de microfibra para limpiar cuidadosamente todos los elementos del motor y quitar los restos del producto. El uso de un limpiador de aire comprimido te permitirá llegar a rincones difíciles de alcanzar y eliminar cualquier resto de lubricante que pueda haber quedado atrapado en espacios reducidos o entre componentes del motor. Este método es especialmente útil para garantizar una limpieza exhaustiva en áreas donde el acceso manual puede resultar complicado.
Por su lado, el uso de un trapo de microfibra te brindará la oportunidad de recuperar de manera más precisa y detallada cada superficie del motor. La suavidad y la capacidad de absorción de la microfibra aseguran que se eliminen eficazmente los restos de producto sin dañar los componentes del motor ni dejar pelusas o residuos indeseados.
Recuerda dedicar el tiempo necesario a esta fase del proceso, ya que una limpieza completa garantiza no solo un aspecto impecable del motor, sino también su correcto funcionamiento a largo plazo. Un motor limpio y libre de residuos no solo será más eficiente, sino que también será más fácil de inspeccionar y mantener en el futuro.
Una vez hayas eliminado todos los restos de producto y hayas asegurado la recuperación total del motor, habrás completado con éxito el proceso de lubricante, dejando tu motor listo para rendir al máximo y lucir impecable bajo el capó.
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